A este escenario adverso para el mercado laboral de la región, se suman la disminución de la participación laboral y el aumento de la informalidad de forma considerable, otorgando mayor precariedad al empleo en la región.
Una significativa disminución en el número de ocupados reflejó el trimestre móvil abril-junio, al registrar una contracción del 0,5% en su variación anual -lo que equivale a 2 mil 644 personas-, provocando el descenso de esta tasa en la región hasta un 52,1%.
Los jóvenes fueron el grupo etario con mayor disminución dentro de este apartado, restándose del segmento comprendido entre los 15 y los 24 años de edad, el 11,3% en 12 meses; mientras que los de la tercera edad sumaron 8,8% en el número de ocupados.
En palabras de Guillermo Riquelme, académico y economista de la Universidad Autónoma, “esto está dando cuenta que la matriz productiva de la región no está proporcionando una oportunidad real de trabajo para los profesionales jóvenes, teniendo en cuenta que el mercado laboral del Maule se distingue una juventud más preparada, pero que no encuentran trabajo”, afirmó.
Dentro de este particular se hizo sentir la brecha de género, siendo las mujeres las más afectadas al descender su tasa de ocupación en casi un punto porcentual con respecto a igual periodo durante el año anterior, mientras que los hombres registraron una baja del 0,3%.
Los sectores que incidieron de forma negativa en la disminución de la cantidad de ocupados fueron la agricultura y pesca (-5,7%), la enseñanza (-6,6%) y actividades profesionales (-19,6%). Los asalariados, tanto del sector público (-7,4%) como del privado (-1,7%) fueron las categorías que más se restaron en la contracción de los ocupados.
Ante tal escenario, Riquelme sostuvo que estos datos no son halagüeños para la región, dando cuenta que la actividad económica, este año, está cayendo en varios sectores económicos importantes de la región.
“De enero a mayo, según el INE, la actividad en el sector silvoagropecuario ha caído en un 20% y en el sector construcción, en la categoría de edificación de nuevas viviendas, está cayendo en torno al 17%”, expuso.
MENOS PARTICIPACIÓN LABORAL Y MAS INFORMALIDAD
La población fuera de la fuerza laboral aumentó en un 5,6% en doce meses, incididos principalmente por inactivos potencialmente activos (13,6%), lo que impactó de forma directa en la reducción de la tasa de participación laboral a nivel regional, la cual registró 55,5%, disminuyendo 1,5 puntos porcentuales.
Otro indicador que aumentó significativamente fueron los ocupados informales, mostrando un alza de 7,8 puntos porcentuales en su variación anual. La tasa de ocupación informal femenina avanzó 3,3 puntos porcentuales, alcanzando 34,2%, en tanto, la masculina (32,4%) aumentó 2,1%.
La tasa de ocupación informal se sitúo en 33,1%, registrando un incremento de 2,6 puntos porcentuales al compararlo con igual periodo durante el año anterior.
El aumento de los informales aumentó considerablemente en sectores como el comercio, donde los informales representan el 37,2%, la construcción (22,8%), la industria manufacturera (20,8%) y actividades de los hogares como empleadores (10,9%).
El incremento de trabajadores por cuenta propia (7,2%), seguidos por los asalariados pertenecientes al sector privado (4,2%), personal de servicio doméstico (17,2%) y asalariados del sector público (23,2%), fueron las categorías en las que más se aumentó la informalidad.
Riquelme lamentó que, con estas cifras, se eleva el grado de precariedad del empleo en la región, generando una preocupación respecto al escenario actual que exhibe el mercado laboral.
AUMENTÓ LEVEMENTE DEL DESEMPLEO
A nivel regional la tasa de desocupación alcanzó 6,1%, experimentando una leve alza de 0,1% con respecto a igual periodo durante el año anterior, así como un aumento del 0,4% en comparación con el trimestre móvil anterior.
A nivel provincial, Cauquenes se ubicó por debajo de la tasa regional con un nivel de desocupación del 3,8%, experimentando una contracción de 1,6 puntos porcentuales; mientras que la provincia de Talca presentó una tasa de cesantía de 5,2%, registrando una baja de 0,2 puntos porcentuales.
En sentido contrario, las provincias de Curicó y Linares registraron una tasa de desocupación por sobre la media regional, alcanzando 6,3% y 7,6%, respectivamente, en donde Curicó presentó un alza de 1,8 puntos porcentuales, y Linares mostró una disminución del 1,1%.